Viendo llorar a la diosa del edén
buscando ciego algo que la haga sentir bien
encontré el mismo infierno en su piel atrapante
y en sus labios la prisión de los arcángeles
firme un pacto con el diablo con una pluma negra
de alas tiznadas que ya no vuelan
mordí el anzuelo y la locura de los corazones muertos
se metió venenosamente dentro de mi pecho
diosa del edén caí en tu trampa
diosa del edén te vendí mi alma
por nada,
por nada
con besos mesclaste tu sabia con mi saliva
y ahora tu veneno a mi idiota corazón castiga
me llena de sentimientos de un profundo odio
haciéndome acabar con todos solo por ti
diosa del edén caí en tu trampa
diosa del edén te vendí mi alma
por nada,
por nada
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